En la partida de Marnes, un rincón delicioso de la provincia de Alicante, el Iris Garden sigue reuniendo cada fin de semana a cientos de visitantes. Christine Lomer y Nick Brown, una de esas parejas británicas que deciden retirarse y perderse en los valles moriscos alicantinos, son los promotores, y jardineros mayores, de este capricho que nació hace algunos años en torno al mundo del lirio. Con el agua de los aljibes existentes en la finca que adquirieron y una ingeniosa red de goteros, Lomer y Brown, un año tras otro, han creado un paraíso donde las variedades y colores de los iris se multiplican. Una vez en la finca, el paseo, con la sierra de Bernia al fondo, es agradable: se pueden comprar bulbos de iris y de otras plantas, se pueden comprar también algunos alimentos del terreno y cerámicas artesanas. Se accede desde Benissa, por Pinos. En la red hay abundante información sobre la finca.
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