El pobre don Benito

galdos y el caballero audaz“Don Benito, el maestro, el pensador, el abuelo, nos ha dado la visión horrible del menesteroso… ¡Y nuestra tristeza ha sido profundísima!”. En la práctica, bastó solo una frase, la que acabamos de trascribir, para dar la voz de alarma en toda España: don Benito, Benito Pérez Galdós, a los 72 años, tenía que seguir trabajando en penosas condiciones.

La frase la escribió José María Carretero, un periodista osado, renovador, que cuando fue llamado a fundar la revista “La Esfera”, aparecida en la primera semana de 1914, echó mano, para los primeros números, de lo más respetado y popular que había en la actualidad española: Joaquín Sorolla en su estudio, el tenor Anselmi, la actriz María Guerrero, el músico Lassalle y don Benito Pérez Galdós. Carretero, en 1914, era un entrevistador excepcional. En realidad fue él, bajo el seudónimo de El Caballero Audaz, el que creó la entrevista de prensa moderna: la de las preguntas concisas, la que contiene frases descriptivas de ambiente, la que envuelve al personaje hasta que se confía y acaba reconociendo, o configurando, el mensaje que el entrevistador pretendía de antemano.

En este caso, el mensaje era que una gloria de las letras españolas, a sus 72 años, medio ciego, tenía que dictar durante cuatro horas al día las cuartillas de las que malvivía. El Caballero Audaz, claro, no mencionó que don Benito había despilfarrado a lo largo de su vida los buenos duros que había ganado con su ingente obra. Tampoco dijo que el escritor canario nunca había sabido administrarse, ni siquiera lo había pretendido. Bastó una frase, que al entrevistador le sonó pronunciada con “velada amargura” y  “sacerdotal resignación”: “Si en el presente quiero vivir, –decía el autor de los “Episodios Nacionales”– no tengo más remedio que dictar todas las mañanas, durante cuatro o cinco horas y estrujarme el cerebro, hasta que dé el último paso en esta vida”.

En realidad fue Alfonso XIII el que puso el foco sobre Pérez Galdós. El 7 de enero de 1914, el monarca y doña Victoria acudieron al estreno de la última obra del literato y al final de la función le invitaron al palco real en un clima de homenaje nacional a un veterano escritor. Don Alfonso regaló un puro a don Benito, charlaron todos un buen rato, y el autor, pese a su no disimulado republicanismo, salió del teatro encantado, especialmente de la amabilidad de la reina. Diez días después, El Caballero Audaz publicó la entrevista en “La Esfera” y encendió la traca de un homenaje nacional al escritor. “El glorioso autor de los “Episodios Nacionales”, a los 72 años, achacoso y casi ciego, tiene necesidad, para vivir, de consagrar al trabajo muchas horas diarias”, escribió la revista “Mundo Gráfico”, propiedad de la misma empresa que “La Esfera”, en su edición del 28 de enero.

El rey Alfonso puso las primeras 10.000 pesetas. El conde Romanones, las siguientes 5.000. Así se fue nutriendo una cuenta “Pro Galdós”, promovida por una Junta Nacional de Homenaje que presidió el primer ministro, Eduardo Dato. Descartada la posibilidad de dar al escritor una pensión, premio o dinero procedente del Estado, la cuestación nacional en homenaje a Galdós, que ahora hace cien años estaba en su momento más intenso, llegó a superar las 113.000 pesetas en junio de 1914. Gracias a la prensa, que seguía la relación duro a duro, no faltó el morbo de comprobar que la condesa de Pardo Bazán, proverbial amante de don Benito en los años mozos, enviaba veinte duros.

A todas estas, el “pobre don Benito”, casi ciego y tan mayor, se había puesto en manos de los reformistas y emprendió la empresa de ser diputado por Las Palmas de Gran Canaria en las elecciones del 8 de marzo. El 21 de febrero de 1914, Felipe Massieu, político canario, escribía a Leopoldo Matos al conocer el proyecto: “Para que todo vaya parejo, hasta aquí, en nuestra isla, donde parecía que todo iba marchando como una seda, ha venido a última hora el dichoso Don Benito a darnos la castaña”. Pérez Galdós fue elegido diputado. Ya no se acordaba de que, dos años atrás, en el libro “Cánovas” de los “Episodios Nacionales”, había escrito: “Los dos partidos que se han concordado para turnar pacíficamente en el poder, son dos manadas de hombres que no aspiran más que a pastar en el presupuesto”.

(En la imagen, El Caballero Audaz y Galdós, en «Mundo Gráfico»)

Acerca de fppuche

Periodista y escritor. Director de “Las Provincias” desde 1999 a 2002. Desde 2011, miembro de la comisión de Gobierno del Consell Valencià de Cultura.
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